Wednesday, February 21, 2007

Ronda doble

Las gotas del espíritu

Pasó la tarjeta de la micro, caminó hasta el fondo, se sentó en aquellos asientos que te hacen mirar atrás. Curioso que haya terminado justo ahí, como diría una amiga, son sólo metáforas, velas como eso.

Al rato la micro trazaba un antiguo recorrido, ella observaba como todo quedaba atrás, su pecho se apretó hasta que reventó en un llanto, que demostraba que la privacidad es parte de una ilusión. La vieja del asiento de adelante, le dio un pañuelo y le pregunto que pasaba, ella ocupó el pañuelo y le dijo “nada”, mientras trataba de tragar el llanto. La vieja le fue haciendo cariño en su espalda, aunque todo era una escena para postal, ya qué la chica no quería el cariño de esa viejecilla altruista, sino de alguien o algo, supongo que quería el cariño de por quien lloraba.

Otro caballero se acercó y le dio una botella con agua, ella se relajo un poco. Mientras se secaba sus lagrimas y bebía agua, noté que no había nada más triste que llorar a vista y paciencia de todo el mundo. No me agrada confesarlo, pero fue cuando se limpiaba yo estallé en llanto, mi recorrido casi terminaba, mientras me mordía la lengua para no gemir, contemplaba absorto como cada uno de los que viajamos en esa micro caíamos lentamente en ese llanto. No entendía bien que le pasaba a los demás, pero a mí solo fue no sentirme solo, que en esos enormes ojos negros me encontré por un segundo.

Apreté el botón y antes de bajar la miré una vez más, caminaba a mi casa, tuve que esperar en el semáforo unos minutos, cuando me limpiaba la cara, empecé sentir como la gente detrás mío se quebraba en lagrimas, sollozos, gemidos y risas.

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Las oníricas aventuras de la joven Bárbara

Le sonrió coquetamente al cajero, sus ojos apenas se podían abrir, sus sentidos reales estaban atrofiados y su consciente totalmente distorsionado. Metió su mano al bolsillo y sacó un par de lucas, la dejo sobre el mesón, seguía sonriendo. Le preguntaron por su pedido por lo menos 3 veces, ella creyó que le respondió 4 veces, el cajero algo hostigado se fue a la cocina, no quedaba mucho que hacer, casi se acababa su turno y luego tenía que cerrar el Mcdonald y lo despacharían a su casa. Pero ella seguía sonriendo en el mesón, esperando un pedido inexistente, así que opto por lo más sano hacerse el loco.

Pero ella tenía hambre, así que al ver que su pedido no llegaba, pasó al otro lado del mesón, vio que habían dejado unos ingredientes listos y una hamburguesa hecha, entonces rápidamente armó una hamburguesa y tomó la que estaba lista, la guardo entre sus pechos, mientras comía la otra. Cuando comenzó a emprender la huída, apareció el cajero, se miraron por un instante, él pensó “que mierda porque me pasa esto”, ella se dijo “tengo que correr” (sí, era adicta, pero quién no, algunos somos adictos a los chocolates, pero muy básicamente a estar vivos, ella era adicta a tratar de sentirse viva, pudo haber tratado de corregir la situación, pero que más da, tenía que correr no por la hamburguesa y tampoco porque estuviera volada, ella tenía que hacerlo y simplemente eso).

Después de la mirada de tensión, ella sacó su mano izquierda y le pego en el ojo derecho y se abrió paso hasta la puerta, se puso a correr por providencia sin rumbo alguno, la adrenalina, le permitía escuchar la sirenas de la noche como la perseguían, mientras el joven cajero, se incorporaba a la escena, le preguntaron que había pasado, por un pequeño instante pensó en la dos posibilidades, una decir la verdad y que la buscaran o la otra cerrar la boca y decir que nada ocurrió (la adicciones van de aquí hacia allá, de tantas formas que no las podemos reconocer, pero este tipo era adicto a ser hueón), así que dijo “me robaron y me pegaron”. Sus amigos salieron corriendo y no vieron nada, así que llamaron a paz ciudadana, estos al recibir el llamado se sintieron grandes y se dieron a la caza de la chica de emociones.

Ella corrió entre callejones hasta que una luz la encontró (¿cómo? Pero ¿cómo? Si su escondite era un lugar infalible… detrás de un basurero, quizás en sus cabales habría recatado que el basurero era más pequeño que ella). Una voz profunda la amenazó, su corazón latía a mil por hora, sentía tantas cosquillas que la recorrían, que seguramente ha sido uno de sus mejores orgasmos, la voz la volvió amenazar, entonces abrió los ojos y levantó las manos con una hamburguesa a medio comer y mientras la paz ciudadana la cuartiaba, llego alguien y dijo “¿Bárbara que hiciste?” se escucharon risas, el tipo de paz ciudadana le preguntó a su compañero que había robado y su compañero le indico la hamburguesa de la mano, el oficial (de mentira) dijo que los dejarían ir, pero que no se volvieran a volar en la calle, así que el individuo nuevo le explicó que vivía por ahí, solo que bajaron a comprar algo y ella había desaparecido, que la estaban buscando.

En la mañana cuando Bárbara despertó y busco su dinero para pagar la micro, se dio cuenta que no tenía nada y dijo “ME ROBARON MIERDA!!!!”.


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Hola mi gente


si estoy produciendo un poco mas mis comentarios personales jojojo

Estos cuentos estan dedicados a Alastor, te quiero mi washa y no sabes cuanto.


En fin se acaban las vacas, todos hicismos cosas... yo me dedique hacer nada... y no hice nada de verdad.

jajaja sin mucho que contar, que hoy fui a tomar una cerveza con una de las personas que mas quiero... fue entrete la salida

se me cuidan
adiosh

"Si no fuera por el ajedrez nunca habria aprendido a ver el todo por el todo."

6 comments:

Anonymous said...

Owwwww!! =)

gracias Washo =*

aunque si bien el segundo relato es beridico, el puñetazo es invención de Demon, yo no le pegue a nadie, solo asalte un Mc donald.
Soy como robin hood pero version antiimperialista en la posmodernidad.. wiiiii!!! =D

tambien se te quiere
Spoiler! Bennet era de la CIA!! XD

ya me largo

P.d: te habia escrito harto, pero se borro X_X.
P.D.2: Me gusto mucho el rpimer cuento ¿me lo dedicas? ¿por que?
oajal la gente fuera asi con uno cuando llora en publico.
Aunque si vomitas tal vez te den leche de chocolate =).

Anonymous said...

=O me encanto el primer relato...tan real

saludos magnetico!

Jacqueline Olivos Arenas said...

tan buenos los cuentos sip me dio mucharisa el de Bárbara es ke no podi estar tan volao jajajjaaj XD

y el primero ya te dije... es como muy cotidiano onda ver a gente llorando y gente que se le acerca para brindarle ayuda mierda! solo se acercan para copuchar :S

en fin eso cuidate

besos

Anonymous said...

me gusta como escribes :D el relato de barbara esta genial xDD
saludooooooos :**

Anonymous said...

jijiji, que divertidos los cuentos... yo asaltaría al kentucky, pero de puro picada, porque venden unas cosas tan asquerosas... aún me duele la guatita y eso que bote casi todo a la basura... ¡¡devuélvanme mi dinero!!
nunca he llorado en la micro porque me da plancha...

siga asi, escribiendo historias tan buenas

besitos!!

~Anna White said...

la del llanto me llegó D: dios, siempre termino llorando en publico, ojalá todos se largaran a llorar por mi

y el segundo está increible : D
me rei

bueno, siga escribiendo no más
saludos :3